UPR,
enemigo
de la comunidad académica
En la Universidad de Puerto Rico en Bayamón, el rector ordenó quitar los portones de entrada. ¿Habrá contado para realizar tan imprudente acción con la aprobación de la comunidad académico, el endoso de los departamentos, de los empleados no docentes, de los estudiantes, de su Senado Académico?
Mucho lo dudo.
Lo más problable es que aumente la delincuencia. Que entre la droga. Que aumenten las violaciones de estudiantes.
¿Y cuanto aumentarán los seguros ahora? ¿Será necesaria una nueva cuota para pagarlos?
Quitar los portones es una acción violenta. La acción violenta de personas a las que no les interesa la seguridad institucional ni la prevención de actos criminales contra los estudiantes que debe proteger por encima de cualquiera otra consideración, con tal de adelantar la agenda política y quedar como el Condesito de la Limonada ante los Síndicos.
Se preguntaba una catedrática del Recinto de Ciencias Médicas en la Asamblea docente celebrada en Caguas si las acciones de la alta administración universitraria estarían determinadas por la mala fe, por la incompetencia, o por ambas.
La pregunta cabe, sin duda. Pero de lo que no cabe duda alguna es de la debacle moral de esa alta administración. Vergüenza en nuestro mundo.
Marcos
Reyes
Dávila
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