.
Lecciones de
la marcha docente UPR
María Gisela Rosado, Presidenta de la APPU, y Luis Sánchez Longo, Presidente de la CONAPU, pueden dormir hoy tranquilos y satisfechos. La convocatoria que lanzó el sector docente a toda la comunidad universitaria, resultó ser un éxito extraordinario en términos de concurrencia. El poder de los profesores universitarios se manifestó claramente hoy.
El minúsculo grupúsculo, según el Presidente de la UPR, De la Torre, resultó estar compuesto por una muchedumbre compacta que llegaba a la entrada del Viejo San Juan y su cola aún doblaba a la avenida por el Capitolio de Puerto Rico. Nunca, que yo recuerde en mi medio siglo de edad, una manifestación universitaria fue tan grande. La manifestación prueba, a mi parecer, el enorme poder de convocatoria que tienen hoy, en medio de la crisis provocada por administradores antiuniversitarios, las dos principales organizaciones docentes. Si bien una parte importante de la muchedumbre estuvo compuesta por trabajadores universitarios no docentes y estudiantes, también es cierto que fueron los docentes quienes lanzaron la convocatoria.
Llega en buen momento. A tiempo para revivir y realimentar las fuerzas del espíritu con confianza en la solidaridad manifestada, para poder enfrentar los días difíciles que se avecinan.
María Gisela Rosado, Presidenta de la APPU, y Luis Sánchez Longo, Presidente de la CONAPU, pueden dormir hoy tranquilos y satisfechos. La convocatoria que lanzó el sector docente a toda la comunidad universitaria, resultó ser un éxito extraordinario en términos de concurrencia. El poder de los profesores universitarios se manifestó claramente hoy.
El minúsculo grupúsculo, según el Presidente de la UPR, De la Torre, resultó estar compuesto por una muchedumbre compacta que llegaba a la entrada del Viejo San Juan y su cola aún doblaba a la avenida por el Capitolio de Puerto Rico. Nunca, que yo recuerde en mi medio siglo de edad, una manifestación universitaria fue tan grande. La manifestación prueba, a mi parecer, el enorme poder de convocatoria que tienen hoy, en medio de la crisis provocada por administradores antiuniversitarios, las dos principales organizaciones docentes. Si bien una parte importante de la muchedumbre estuvo compuesta por trabajadores universitarios no docentes y estudiantes, también es cierto que fueron los docentes quienes lanzaron la convocatoria.
Llega en buen momento. A tiempo para revivir y realimentar las fuerzas del espíritu con confianza en la solidaridad manifestada, para poder enfrentar los días difíciles que se avecinan.
El gobierno, y la alta administración, no cejarán en su propósito de desarticular la universidad, amordazar y hacer que predomine en ella el orden y el silencio de los cementerios.
Frente a ese propósito del fascismo, solo vale la fuerza que solamente se consigue con la unidad de propósito de la comunidad académica, pues el fascismo es sordo, no dialoga. Sólo respeta la fuerza.
Una y otra vez se oyó la consigna
“Once recintos, una UPR”.
Marcos
Reyes Dávila
No hay comentarios:
Publicar un comentario